17 mar 2024

HABLANDO CON DAVID 2024 - XXIII

 

He escuchado al silencio
cuando dormía esta noche.
El silencio a mí me hablaba
y yo atento escuchaba
lo que el silencio decía.

Yo escuchaba tu voz
en el silencio escondida.
Sé que el silencio de ti
cariño mío me hablaba,
es tu mensaje lo que en mí
el silencio me dejaba.

Pero hijo mío del alma
al despertarme yo quiero
recordar esas palabras
que me trasmite el silencio
y que me es imposible
al despertar recordarlas.

Me ocurre muy a menudo
cuando yo sueño contigo
y feliz yo soy en ellos,
pues en tus sueños te tengo,
te tengo cerca de mí 
te siento, te hablo, te escucho,  
te abrazo, te beso…
mas cuando yo me despierto,
yo sé bien que he soñado contigo,
que feliz fui en el sueño,
mas yo jamás de ellos nada, 
nada recuerdo.

No recuerdo de que 
hemos hablado en ellos, 
ni de donde hemos estado, 
ni cuanto duro ese sueño.

David cariño, no me importa
los sueños no recordarlos.
Yo quiero seguir contigo 
contigo seguir soñando
cada noche cuando duermo
y en mis sueños encontrarte
hablar contigo y besarte,
sentirte cerca de mí
para poder abrazarte.

Los sueños no son perfectos
pero son; 
el mejor de los momentos
de estar contigo que tengo desde,
que te alejaron de mí.

15 mar 2024

HABLANDO CON DAVID 2024-XXII

Hola David hijo mío.
Los números del calendario
que marcan el paso de los días
están locos y enfadados,
pues apenas ellos nacen
al momento son borrados.

Los días pasan tan rápidos
que apenas si se adivina
si estamos en verano
o ya el otoño se atisba.

Las hojas del calendario,
son las hojas de los álamos
que se alinean en los prados
y cuando el otoño asoma
y desprenden su pecíolo
cayendo al suelo bailando
con las brisas de la tarde
para morir en el barro.

Vamos quemando los días
desde tu ausencia obligada,
tu hija, creciendo va día a día
tan bonita y siempre amada.
Nos embelesa los días,
las noches con ella no son tan largas
ella es el salvavidas que nos
acerca a la playa.

Vamos quemando las fases
que el tiempo a nuestro
vivir les marca.
Los días pasan muy lentos
y al mismo tiempo no paran.
En tiempo a nuestras vidas
las gobierna sin hablarlas,
el tiempo a nuestro vivir 
lo lastra.

El tiempo es inexorable,
el tiempo, su tiempo marca.

David; nuestro cada amanecer
cada mañana nos llega,
tras esas noches tan larga
en que el reloj se demora.

A mi soñar contigo me cuesta,
porque las paso hablando (contigo)
y el insomnio cada noche 
en mí almohada se acuesta.

Buenos días hijo mío.
hasta mañana, tú descansa y sueña
que siempre tú estas conmigo
nunca, de mi mente tú te alejas.
Te quiero hijo mío, te quiero…
Sé que bien, tú lo recuerdas.


13 mar 2024

HABLANDO CON DAVID 2024-XXI

Buenos días hijo mío.
La soledad te envuelve
cuando uno se despierta
y no escucha un ruido,
la casa está sola y quieta.
Mi casa si tú no estás,
mi casa está desierta.
 
Que inmenso es nuestro hogar
desde el día en que te fueras,
que pequeño era nuestro piso
cuando gozábamos de tu 
ansiada presencia.
 
Ahora nos sobra el espacio,
ahora en él, el silencio se acomoda,
junto con la soledad,
con los llantos y las tristezas.
 
David, cuantas cosas han cambiado.
Nuestra vida no es la misma,
nuestra vida ahora es otra.
En ella estamos perdidos
en ella no nos hallamos,
nos faltas tú hijo mío, 
tu presencia añoramos.
Tu ser todo lo llenaba,
cuando tú estabas en casa 
la armonía era completa.

Donde quiera que estemos,
buscamos de ti todas las referencias
que nos ayudan a seguir
en esta vida que no es; 

la nuestra, la vida nuestra.
 
Vivimos de los recuerdos
en ellos tú siempre estás
en ello te encontramos
sin tenerte que buscar.
 
Cariño a esta vida, 
nos tendremos que adaptar.

Un abrazo hijo mío 
me gusta contigo hablar 
pues cuando hablo contigo
en ti siempre encuentro, 
la esperanza y la paz.