27 mar 2013

TE PROMETO QUE TÚ SI PUEDES

El martes cuando caminaba por el monte, como un martes más aunque en esta ocasión caminaba solo, el tiempo era muy gris con mucha niebla, los arroyos cantaban ajenos al senderista, los robles aún desnudos tenían sus ramas cubiertas de pequeñas y transparentes perlas de agua que se habían posado de la bruma, en el sotobosque las pequeñas aves cantaban marcando sus territorios y mostrando todo poder y su belleza a las hembras, en los pinos y robles más altos los cuervos graznaban también barruntado la primavera que ya está con nosotros, los arrendajos volaban llevandose la paz del bosque con sus estridentes gritos. Yo cuando camino solo por el monte, suelo llevar la radio puesta y no es por escucharla, que la verdad no soy yo muy aficionado a escuchar la radio, ni siquiera cuando hago un viaje largo en coche. Solo la suelo poner a las horas en punto para escuchar las noticias y sobre todo las noticias del tráfico, en el monte, la suelo llevar para sentirme acompañado y para que no me cebe con el sendero, sobre todo en las subidas exigentes. Bueno pues el martes, escuchaba RNE1 El Día Menos Pensado cuando llamo mi atención la felicitación a una joven que cumplía 26 años ese día, nada del otro mundo ya que ese día cumplirían 26 años un montón de chicas y chicos, pero esta era un poco especial, ese día empezaba o había empezado el tratamiento de quimio para su cáncer. Olga que de esta manera se llama la chica, transmitía en su forma de hablar una fuerza y un optimismo de cara al futuro que os puedo asegurar que seguro, seguro que este modo de enfrentarse a su enfermedad, es la mejor medicina contra su mal. Hablaba de tú a tú al cáncer, como si fuese algo normal y natural, este mal que es tan traicionero, silencioso, sibilino que se instala en nosotros sin previo aviso, este mal, se tendrá que rendir sin condiciones ante esa vitalidad, esas ganas de vivir, esas ilusiones de futuro, de un futuro a largo plazo que mostraba esta chica. Yo sé que Olga, que de esta manera se llama, lo vencerá y el cáncer se rendirá sin condiciones y lo vencerá por si misma y también  con el apoyo de los muchos miles de personas que con el corazón estaremos muy, muy cerca de ella en sus malos momentos y también en los buenos a través de su blog http://teprometoquemevoyaponerbien.blogspot.com.es
Yo desde aquí la quiero mandar toda mi admiración y mi fuerza para que nunca, nunca se sienta que está luchando ella sola. ¡Animo Olga, tú si puedes!

DEJA QUE EL TIEMPO PASE, NO LUCHES CONTRA ÉL.

Deja que la lluvia moje los campos, corra por tu rostro,
y se deslice suavemente sobre tu piel.
Deja que el frío penetre en tus carnes y erice el bello de tu piel.
Deja que el sol de brillo a tus cabellos y color dorado a tu piel,
Deja que la nieve blanquee tus campos
y cubra con su blanco manto los montes también.
Deja que el dolor te haga a ti más fuerte
y acrisole tus fuerzas, tu corazón, tu fe.

Que los campos se expían con los hielos y las nieves.
Que los valles se visten de flores y lucen sus colores tan bien
por las lluvias caídas en el año que son su sangre, su vida, su bien.
Que el río canta y se ríe por la nieve que corre por él.
Que tu fuerza, tu humor y tu sonrisa son frutos de aquellos,
de aquellos momentos que tuviste y tienes aún que padecer.
Se valiente y lucha con fuerza y optimismo
que seguro que los vas a vencer.
Y mañana cuando lo recuerdes, tú lucirás como el campo florido,
brillaras como rayo de sol, reirás y cantaras como cantan los ríos
y ante ti un futuro muy largo y muy bonito, un camino aún por recorrer.
Olvidaras los tiempos ya pasados y nunca más,
nunca más a ti el desanimo volverá, pues tu vida será ese camino
repleto de sueños y de felicidad.
Al temor se le vence con el animo, al desanimo con la felicidad,
a la pena se la vencen riendo y riendo y soñando un futuro siempre habrá.

1 comentario:

Eva Margarita Escobar Sierra dijo...

HOLA RODRI:
La magia de tus palabras, es sanadora. La grandeza de tu alma, es la que marca el sendero que debemos seguir, los que tenemos la dicha de conocerte de algún modo.
Por algo eres el guía que nos enseña el sendero verdadero para encontrar la felicidad.
Eres y siempre lo serás mi maestro, mi guía, mi poeta preferido y también mi amigo, légano, no conocido, pero siempre cercano.
Cómo me encanta leer algo nuevo tuyo.
Tú amiga, tu aprendiz. Eva