30 sept 2019

OCASO

EL TIEMPO PASA Y NO, 
NOS DAMOS CUENTA
Siento que el tiempo pasa 
y después de muchos años 
hoy me doy cuenta.

Mis manos temblorosas 
de esto, a mí me alertan. 
Mi espejo cada día, 
cuando yo me miro 
a mí me miente, 
nunca refleja, 
nunca enseña la realidad,
la realidad que busco 
no me la muestra. 
Solo me enseña, 
lo que yo deseo ver 
y después, lo borra.
Y la verdad y, 
la realidad es; 
siempre otra, otra.

Mis piernas 
ya se cansan 
y a veces fallan,
y a veces tiemblan. 
Ya no son las de antes; 
aquellas dos columnas 
fuertes y erectas,
que subían y bajaban
cuestas y más cuestas 
y nunca ellas temían 
las escaleras. 
Ahora son muy frágiles 
y se tambalean.

Mis ojos ayer veían 
lo que quisieran
hoy, tan solo ven; 
bultos y sombras.

El tiempo se me fue 
y yo no quise ver, 
ni darme cuenta.

El tiempo no se borra,
el tiempo queda escrito
en nuestros cuerpos 
para su gloria.
El tiempo se refleja 
en nuestro ocaso 
y decadencia. 

Debemos aceptarlo 
tal, como es. 
Saber caminar con él, 
es lo que importa.

No hay comentarios: