Quizás mañana me recuerdes,
pero hoy, hoy te has olvidado de mí.
Quizás recuerdes que la luna
nos sorprendió a ti y a mí,
más de una noche vagando
por esas calles sin fin,
sin un rumbo que seguir.
¡Que felices éramos ambos!
Quizás mañana sea tarde
pero aún hay tiempo hoy
para volver a encontrarte
y volver a enamorarte
para que vuelvas a mí.
¡Y volver a ser feliz!
Me dejaste, te marchaste,
te fuiste sin un adiós,
ni siquiera te acordaste
de dejar sobre la mesa
un número de teléfono o una,
una simple dirección.
¡Para poder, yo llamarte!
¡Y encontrarte yo a ti!
Desde aquella tu huida
nunca más pude vivir,
yo he errado por el mundo
buscando en cada rincón,
en cada cala escondida,
en cada pequeña aldea,
en la ciudad más lejana,
en las más altas montañas,
yo he buscado en sus cimas
en los valles más profundos,
en las fértiles riberas que
riegan los arroyos y los ríos,
que agua fresca acarrean,
en la más abruptas cárcavas,
en sus más profundas cuevas
e incluso te busqué;
era tal mi desespero
en mis zapatos escondida.
He intentando encontrarte
era tal mi desespero
en mis zapatos escondida.
He intentando encontrarte
para poder contemplarte,
una vez, solo otra vez.
¡Y feliz volver a ser!
Yo te he buscado
por todo el mundo
por arriba y por abajo,
por arriba y por abajo,
más no pude yo encontrarte,
seguro, seguro que te escondiste,
para que no te hallase.
Sé que me has olvidado
y yo, yo sigo de ti muy enamorado.
¡Quizás!, es que yo a ti,
yo a ti; seguro que te he soñado.
1 comentario:
Hola Rodri:
Tan linda esta poesía como todas las tuyas.
Llena de ternura, de dulces recuerdos, de sueños, que solo tu sabes, si se realizaron o solo fueron sueños.
Leerte es, caminar por diferentes caminos reales y también, imaginarios
que nos hacen sonreír y suspirar.Para luego, regresar a la realidad de nuestras vidas.
Chao amigo, un abrazo, Eva
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