21 feb 2017

A JOSÉ


MI HERMANO, MI AMIGO.
José amigo mío, te has ido solo, 
como tú solías siempre hacerlo.
Caminando contigo y el silencio.

Te has ido sin hacer ruido 
caminando a solas, en el tiempo.
A solas contigo y con tus sueños.

Te fuiste andando muy despacio,
por el sendero que va hacía tu huerto.

Te has ido José amigo mío,
como se van los hombres buenos, 
con tu mirada fija en el horizonte,
de los paisajes pardos del monte
en el invierno.

Fue un día tibio de febrero, 
cuando las cigüeñas vuelven
a su nido 
de la torre del reloj de nuestro 
pueblo.
Yo vi a esas aves, 
con sus vuelos serenos, 
decirte adiós volando en círculos 
sobre el coche que te llevaba a ti, 
hacía el huerto del silencio.

Tras él caminaban tu esposa, 
tus hijos, hijas y nietos, 
caminaban todos tus hermanos, 
y junto a ellos, 
te decía adiós un pueblo entero.

En un rincón del huerto 
tu quedaste,
en un rincón tranquilo y sereno 
un rincón al que visita cada día
el tibio sol de nuestro invierno.

Allí quedaste tú para siempre 
mirando hacia el campo de tus sueños 
desde este rincón donde se escucha 
el cantar perenne de nuestro río 
tan joven y a la vez tan viejo.
Ese río que fue; tu confidente, tu amigo 
con el que compartías tus secretos.

Te has ido José querido amigo mío 
ya se cumplieron, todos tus sueños, 
tus noches serán tranquilas y eternas, 
nosotros siempre te acompañaremos 
con nuestro cariño y nuestros recuerdos.

Descansa en paz José amigo mío, 
que tú siempre vivirás en los recuerdos 
de aquellos con los que compartiste 
tus buenos y tus malos momentos.

Amigo José, que Dios te tenga en su seno.

1 comentario:

Eva Margarita Escobar Sierra dijo...

Lamento mucho la pérdida de tu amigo. Dios le dé mucha paz a él, a su familia y a sus amigos como tu.

Mi cordial saludo para todos y comparto su dolor. Dios los bendiga. Eva