El Puente de la Risa. Manga del Mar Menor.
...NOS HABLA.
Un
velero en el horizonte,
caza
los vientos del Norte,
una
ola muy melosa
que su
quilla besa y besa.
Un
viento bonancible
que
al velero mece,
que
al velero acuna
para
que no despierte
y
siga soñando y sus sueños, sueñe.
Unas
olas que en sus espumas
traen mensajes
de otros mares,
de
otras costas, de otros puertos
de
muy remotos lugares
y
los deja en nuestras costas.
Unas
olas que le cuentan
a
las arenas de las playas
historias
de otros mares,
leyendas
de otros pueblos
desengaños
de los sueños
que
un día en el mar
quedaron
para siempre
y
al fondo fueron
y
en el fondo duermen
el
sueño eterno, quizás
de
él, nunca despierten.
Que
cuentan los secretos
de
esas islas perdidas
de
esos mares inmensos,
de
sus playas de arenas,
donde
antiguos piratas,
corsarios
y filibusteros
enterraron
sus sueños.
De
esas arenas tan finas
tan
blancas de coral y de nácar
que
el mar,
cual
muela de molino
poco
a poco desmenuzara.
Las
olas del mar
una
vez y otra vez
se
acercan a la orilla,
una
vez y otra vez
se
arrojan con gran furia
contra
el malecón,
contra
los farallones
de
rocas bien erguidas
que
no ceden por nada
rocas
que no tienen corazón,
y de
emociones carecen.
Rocas
y paredones
que
al mar lo aprisionan
y
le calman su ira.
El
mar se siente encerrado,
el
mar se siente prisionero
el
mar no quiere estar atado.
El
mar es el señor de las
profundidades,
de la calma
y
de las tempestades,
el
mar es señor y amo de sus olas,
el
mar es el señor del canto
de
sirenas y de las caracolas.
El
mar es el señor del viento
y
de la brisa, del sol y su sonrisa.
El mar es...
No hay comentarios:
Publicar un comentario