Poesía Romántica de Colombia.
Un día más,
como muchas veces hago;
entré de nuevo
en tu lindo diario,
y uno a uno yo leí tus versos
versos que una vez más
me han transportaron
a tu mundo íntimo
de amor, de ilusiones,
fantasías, realidades
y también, lo siento,
alguna otra vez,
a tu dolor y a tu llanto.
Encontré en ellos
muchas alegrías,
sueños realizados
amores logrados,
amores vividos,
otros, idealizados.
En ellos yo hallé
y me trasladé;
a esos mares
lejanos y extraños,
con playas
de finas arenas
y algún que otro
coco que ha rodado.
En la arena había
nombres, garabateados.
También pude ver
hermosas palmeras
con vientos bailando
y lindas gaviotas
volando en el cielo
recortando vientos
siguiendo a los barcos.
Escuché historias
de viejos bucaneros,
de barcos hundidos,
tesoros enterrados,
amores dejados
en puertos extraños.
Seguí, seguí yo leyendo
pues nunca me canso
de leer tus versos.
Tus versos escritos
con tanto cariño,
tanto desparpajo
y uno a uno
me fueron llevando,
a aquellos tus sueños
que cada noche
tú sigues soñando.
Sueños que muchos
tú ya has realizados
y otros,
otros muchos sueños,
que nunca, nunca, nunca
jamás has lograron.
Leí entre líneas
entre verso y verso,
entre estrofa y estrofa
lo que tú has escrito
y para escribirlo
nunca,
tú has utilizado,
ni papel ni tinta,
tan solo pensarlos.
Amiga mía,
te sigo leyendo,
te sigo escuchando,
te sigo admirando,
aunque no escriba
en tus lindos versos
ningún comentario.
Me es imposible
el poder decirte
lo lindo que son,
lo que me transmite
cuando los estoy leyendo
y asimilando.
2 comentarios:
Hola mi querido amigo.
Gracias mil y mil gracias (como decimos acá) cuando vemos que nos elogian tal vez, sin merecerlo.
Gracias por ser mi amigo. gracias por tu cariño, gracias por compartir a mi lado mis ilusiones, mis sueños.
Sueños que quedaron perdidos en en camino de mi vida, sueños soñados y quizás, no vividos o sueños vividos, pero quizás, perdidos en el diario vivir. En realidades, lindas unas, y otras, duras y tristes. Gracias querido amigo.
Bogotá, 16 de agosto de 2019
Medio día ya, de un día frío y oscuro. Otro día vivido y otro día lleno de sueños de realizaciones y de esperanzas.
Gracias amigo mio, por tus lindas e inmerecidas palabras, para mi trabajo. (Mi… pasa tiempo o mis sueños. Solo sueños de mujer romántica, soñadora y quizás, perdida en un tiempo no propio. Gracias)
Eres generoso, eres bueno y he tenido, en los años que llevamos de conocernos, la dicha de aprender de ti tantas cosas buenas, que solo puedo decirte gracias… muchas gracias. Gracias como me guías, gracias como me enseñas, gracias. Gracias.
Todo lo que he escrito, (bien o mal) Tú estás ahí. Eres ese faro que en la oscuridad y soledad de la noche de mi vida, me lleva por el camino de los sueños y de un mundo de fantasía donde he encontrado felicidad, he soñado y también te he visto pasar, solamente, como se ve pasar un sueño, una ilusión o como pasa, entre nuestras manos, el agua que corre en el pequeño rio de montaña. O cuando en la arena en noches, oscuras o claras de luna, el mar nos habla de una historia tal vez, de amor, sin principio ni fin. Gracias mi querido amigo.
Nosotros, los americanos, damos mucho, las gracias. Porque sabemos que nadie tiene la obligación de darnos nada, de compartir nada, pero al ser tan románticos, como somos, agradecemos el cariño que nos demuestras. Gracias por ello.
Querido amigo. Dios siempre te bendiga y que tu generosidad, sea siempre igual.
Un gran abrazo con todo mi cariño y amor tu amiga:
Eva Margarita Escobar Sierra.
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