Hola David, buenos días.
Egunón cariño mío.
¿Cómo hoy tú te encuentras?
Me gustaría un día
de ti poder escuchar,
de ti, alguna respuesta
y con ella yo saber
y poder tener certeza
de que tú,
Egunón cariño mío.
¿Cómo hoy tú te encuentras?
Me gustaría un día
de ti poder escuchar,
de ti, alguna respuesta
y con ella yo saber
y poder tener certeza
de que tú,
siempre a mí me contestas.
David, cariño mío.
Eres jinete del aire que cabalgas
en la espuma de las olas,
eres luz de amaneceres
que irradian tanta belleza
en el nácar, de conchas y caracolas.
Eres tú el espíritu y la esencia
que junto a mí siempre va
y hace más llevadero
el caminar de las horas.
Eres jinete del aire que cabalgas
en la espuma de las olas,
eres luz de amaneceres
que irradian tanta belleza
en el nácar, de conchas y caracolas.
Eres tú el espíritu y la esencia
que junto a mí siempre va
y hace más llevadero
el caminar de las horas.
Eres tú querido hijo
en quien pienso a todas horas.
Y contemplo tu ansiado rostro,
que me mira y tu mirar me consuela.
David, tú me hablas sin hablar,
tu mirada me da fuerzas,
para seguir adelante
y el poder soportar
mi gran dolor y mi pena.
tu mirada me da fuerzas,
para seguir adelante
y el poder soportar
mi gran dolor y mi pena.
Contigo me gustaría estar
y muy juntos contemplar
el tiempo como se aleja.
Ese tiempo que pretende borrar,
el tiempo que ya no espera.
No espera a que llegue otro tiempo
que renueve las esperanzas
y que aporte alegrías, felicidad
a una vida nueva, nueva.
y muy juntos contemplar
el tiempo como se aleja.
Ese tiempo que pretende borrar,
el tiempo que ya no espera.
No espera a que llegue otro tiempo
que renueve las esperanzas
y que aporte alegrías, felicidad
a una vida nueva, nueva.
David amor mío contigo quiero soñar
y en esos sueños juntos,
muy juntos poder estar,
sin que exista el dolor
y las penas que nos hace
tanto sufrir y penar.
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