30 mar 2016

DESDE QUE TE FUISTE…



…TODO TRISTE ESTÁ.
Ayer mis pasos inconscientemente 
me llevaron hasta nuestro prado, 
lo encontré más triste yo lo vi apático.

Ayer, cerré mis ojos queriendo yo verte 
y solo, tan solo vi ese vacío que es 
hoy mi presente desde que te fuiste.

Estaba solo, muy solo y ausente, 
estaba intentando yo ver mi presente. 

Era una tarde de abril o de mayo, 
era una tarde de primavera 
en nuestro prado. 
En él se escuchan el rumor 
de insectos que están laborando. 
En una linda flor, la flor de un cardo 
yo vi a dos abejas, una mariposa 
y a un negro tábano.
Todo es armonía en la primavera.
¡Si tú estuvieras!
Te llamé para que las vieras, 
pero tú no estabas. Eras tú la ausencia.

Todo era armonía, en el verde prado, 
había hierba fresca, flores, abejas, 
mariposas, gorriones, jilgueros, libélulas
todo estaba alegre cantando.
Solo tú faltabas; tú, te habías marchado.

Aquel castaño que está situado 
en ese rincón del verde prado, 
aquel añoso, trasmocho, seco, retorcido 
y tan agrietado, 
aquel castaño con el tronco hueco 
por sus muchos años, por intensas podas, 
por ardientes rayos. 
Sí, aquel que un día tú me dijiste 
que estaba seco y estaba estorbando. 
A aquel castaño, le ha brotado un tallo 
muy fuerte, muy bello y lozano.
Es un hijo nuevo, es; un nuevo castaño 
que en cuanto crezca ocupara el sitio 
que su padre le ha reservado.

Desde que te fuiste es otro nuestro prado.
El prado está triste, está más extraño, 
le falta tus risas, tus pasos, tus manos,
las flores se mustian, extrañan tus besos
caricias y abrazos.

Desde que te fuiste es otro el arroyo 
que corre a su lado.
Ese alegre arroyo donde nos bañamos, 
otras son sus aguas, otros son sus alisos, 
mimbreras, sus sauces y álamos.

Entre la floresta no he vuelto a escuchar
desde que marchaste al ruiseñor cantar,
su nido está frío, sus huevos no están,
añoro sus trinos y verlo volar.
Desde que te fuiste triste todo está.

1 comentario:

Eva Margarita Escobar Sierra dijo...

Hola mí querido amigo:

Como puedes darte cuenta. Comencé, por el último, que fue el primero, que escribiste.

Todos son tan hermosos. Que da igual empezar por uno o por otro. Además, es una trilogía perfecta, de tus sentimientos, de tu búsqueda en el campo, de tu amor, en esta linda primavera que has comenzado a vivir.

Sigue mi consejo: Busca en ti. Sal al campo, camina por el sendero conocido y sonríe. Ella está ahí. Si cierras tus ojos un momento, sentirás, su perfume, su fragancia, quizás, el viento golpee suavemente tú cara y lo compararás, con un suave y tímido beso, de saludo o de despedida.

Bueno mi querido amigo: Es perfecto, Pero busca muy dentro de tu corazón y nada más.

Otro abrazo para mi gran amigo Eva