... ESCUCHA AL VIENTO.
Deja
pasar el tiempo que todo cura,
que
en sus alas se esconde los recuerdos,
los
silencios, las promesa, las caricias,
las
locuras...
Deja
pasar el tiempo que se desliza
sobre
hojas de papel sobre las esferas lisas
que
cuelgan de la pared.
El
tiempo solo tiene una medida,
el
tiempo nunca se ve,
solo
notamos que el tiempo
se
va escribiendo en la piel
y
en, estampas de la vida.
Escucha
al viento y al aire
que
ellos te hablaran bien.
Ellos,
están presentes,
en
el mal y en bien.
Están
siempre en las palabras
que
se dicen sin querer,
que
luego quieres borrarlas
pero
ya no son de él.
Son
del aire y del viento.
Están
presente en los besos,
en
las caricias también,
en
los guiños en los reproches
en
el adiós a un tren.
Están,
en el llanto del que nace
y
en el último suspiro
de
aquel que ya se nos fue.
Están,
en las promesas no escritas
que
el viento se las llevó,
en
las palabras que dichas
fueron
para la ocasión.
Escucha
siempre al viento
que
a tus sentidos transporta
la
fragancia de los huertos,
olor
a tierra mojada,
a
hierba recién segada,
el
aroma del jazmín y de la rosa.
Él,
en tus oídos susurra
las
promesas olvidadas
las
palabras que un día oíste,
y
que fueron ya olvidadas.
La
música de las risas
de
aquellas lindas veladas
que
un día tú viviste
y
que ya tú olvidaras.
Escucha
al viento que trae
hasta
ti, los reproches del olvido
que
no quieres recordar
que
el tiempo ya ha borrado
y
que los dejaste atrás.
El
tiempo y el viento siempre,
siempre
caminan a la par
al
tiempo hay que saber,
saberlo
dejar atrás
y
al viento y al aire hay
que
saberlos escuchar.
1 comentario:
Querido Amigo. Es muy hermosa esta Poesía.
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